En mi casa la Navidad siempre se ha celebrado al estilo polaco. Y si por algo se caracteriza esta, es por las múltiples tradiciones que la acompañan.
Tiene que haber una cantidad determinada de
platos de comida, unos elementos decorativos específicos, unos ingredientes… En
conjunto, una mezcla de “normas” que le añaden un punto muy bonito a la
celebración de estas fechas.
Por eso, cuando me fui de casa, decidí
instaurar en mi vida mis propias tradiciones navideñas que hagan que esta época
sea más especial aún.
Galletas
Como ya os comenté, adoro las galletas de
Navidad. Hago una tanda el primer fin de semana de Diciembre y depende de lo
rápido que se acaben, hago otra, o incluso otras dos.
Os recuerdo que podéis leer mi secreta
receta de galletas en este post.
Poner el árbol
Como soy no creyente, el belén nunca ha ido
mucho conmigo. Sí es cierto que son bonitos, y que es entretenido colocar todas
las figuritas y echarle imaginación para crear el pueblo, pero aun así, yo me
quedo con mi árbol.
Por eso, no puede fallar en mi Navidad la
mezcla de primer fin de semana de Diciembre, villancicos y cajas llenas de
adornos.
Ir a ver las luces
No sé vosotros, pero yo no puedo resistirme
a ir mínimo una vez a Madrid, pasear por sus calles iluminadas, fotografiar los
árboles de Sol y de la Plaza Mayor y reírme de los gorros extraños de los
puestos del mercadillo.
Love Actually
No sé cuantos años tendría la primera vez
que vi esta película, pero tuve claro que se quedaría conmigo mucho tiempo.
Las historias de amor ya tan de sobra
conocidas, el villancico de mi rockero favorito y los distintos modos de amarse
que presenta es algo que año tras año me acompaña.
Sofá, manta, palomitas, chocolate caliente
y Love Actually, ¿puede haber mejor plan?
Cena con Moon
La primera cena navideña que hicimos Moon y
yo ni siquiera fue cena, más bien merienda llena de chocolate. Vivía en la
habitación enana que os mencioné en el post del árbol de navidad y nos dimos
los regalos sentadas en la cama.
Al año siguiente repetimos, pero esta vez
en la casa que yo compartía con mi por aquel entonces novio; acompañadas de una
cena polaca, mi novio y un amigo en común.
La siguiente vez fue en mi pequeño “agujero
de rata”, una casa tan pequeña que tuvimos que cenar en el suelo, porque no
podía desplegar la mesa grande.
Y dentro de dos semanas pensamos repetir.
Estaremos en mi casita de ensueño, desplegando la mesa grande, solas ella y yo.
¿Puede haber mejor plan?
Y vosotros, ¿qué tradiciones navideñas tenéis? 😊
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